ESTUPOR

Yo, berilo de mujer.
Tú, impávido.

Te pudiste adueñar
de efervescente desnudez
de burbujas al amanecer.

Fallo mío, mojar los pies
de quien no es orfebre.

Me pudiste conquistar
sin vigilancia, sin atención
sin jabonarme de pasión.

Una gema para admirar
transparente para apreciar.

Yo, 
pude haber sido una pompa 
flotando en frenesí sensual, 
espuma bañando la piel...
y tú, inmutado.

El borbollón explotó
el tiempo finiquitó
¡Ya, olvidado! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario